El Castillo de los Bobadilla, MOYA

Foto de Alfredo Sánchez Garzón

Qué ver en la Villa medieval de Moya

En el exterior de estas históricas ruinas se puede apreciar su doble muralla y su solitario castillo situado en lo más alto del cerro. A lo largo del recinto amurallado se abren ocho puertas, construidas en distintos momentos históricos para permitir el acceso a la Villa. En el interior de la muralla, aún quedan en pie algunas de sus edificaciones.

• El Castillo de los Bobadilla: La entrada al patio de armas está flanqueada por dos torreones que hacían muy difícil la entrada por la fuerza. Constaba de tres líneas defensivas, una muralla que rodea el pueblo, y dos separados por el castillo. Antiguamente se accedía a la fortaleza por medio de un puente levadizo, ya que está separada del pueblo por un gran foso.
Iglesia de Santa María la Mayor: Es el templo más antiguo de la villa y el único que aún tiene actividad, gracias a su restauración. En su interior se encuentra el reloj de la ciudad, que aún puede dar la hora.

Ruinas de Moya

Las Ruinas de Moya fueron declaradas Monumento histórico-artístico en 1982, y constituyen un importante vestigio arqueológico de lo que fuera una notable ciudad medieval y moderna.

Situadas en lo alto de un cerro alomando, se hallan circundadas por cinco Recintos amurallados y ocho puertas. Propiamente, la ciudad se halla en el centro del Primero y el Segundo, conteniendo los principales edificios civiles y religiosos en torno a la plaza Mayor: La Casa Ayuntamiento (antiguo pósito municipal), el Convento de las Concepcionistas y seis templos: «iglesia de Santa María», «iglesia de la Trinidad» y la «iglesia de San Miguel» (actual cementerio). Otras iglesias han desaparecido hasta los cimientos: San Juan y San Pedro. La «iglesia de San Bartolomé», situada entre el Segundo Recinto y el Tercer Recinto, se halla absolutamente arruinada, pendiente de recuperación como centro de interpretación. Poseyó también dos centros asistenciales: el «Hospital de Pobres» y el «Hospital de Cautivos», éste desaparecido hasta los cimientos.

El Castillo de Moya se halla en el extremo meridional del cerro, entre el Primer Recinto —la Albacara— y el Cuarto Recinto, donde se abre la Puerta de Carros.

El Quinto Recinto se halla en la ladera nororiental del cerro, corresponde a La Coracha, estructura amurallada para la defensa del abastecimiento del agua que posee dos torres: la «Torre del Agua» (que protege el manantial) y la «Torre de San Roque» (Puerto Seco donde se cobraba la lezda, impuesto por el paso de mercaderías entre reinos).
(20 de Septiembre de 2017)