Mayos - 2017. La Ventosa
No podía ser de otra forma amigos/as de Facebook y de la Ventosa.
El ambiente festivo que habíamos creado en nuestro pueblo el día 29 de abril con la Misa y Procesión, y la comida de Hermandad seguida de cena y baile, nos había dejado un regusto y el deseo de seguir disfrutando juntos el día 30.
! Y qué mejor forma de hacerlo que cantando los Mayos!
AAAAAh, los Mayos... ese cántico ancestral y hermoso que es una loa a la Virgen María, personificada en cada mujer.
Viene tu galán
prometiendo mayo
con verdes pimpollos
rojos y encarnados
Ese cántico de alabanza que nuestros antepasados dedicaban con entusiasmo e ilusión a su amada, bajo su balcón o ventana, con la mirada fija y el corazón agitado, esperando ver encenderse la luz y ser oído por Ella...
Son las doce en punto de la noche, y dentro de nuestra Ermita el Calvario, comienzan los cánticos. Empiezan los hombres con sus vozarrones que rebotan sobre las bóvedas de la Ermita, inundan el recinto sagrado, y salen por las puertas abiertas extendiéndose por el valle y los campos verdes y oscuros. Hasta las palomas de la Ermita, y los pájaros del campo, se despiertan y rebullen en sus nidos, sin decir ni pío extasiados por el bello cántico.
Estamos a treinta
del abril cumplido
alegraos mozas
que mayo ha venido
Y contestan las mujeres que con sus finas voces, suavizan con encanto nuestro sentido del oído:
Mayo bien venido
a este pueblo sea
que con su venida
las damas se alegran
Tres acordeones acompañan a los cantores, poniendo con sus acompasados acordes el complemento musical, que se extiende e inunda la Ermita y los campos, y eriza los cabellos acelerando los corazones de los presentes...
Viene tu galán
prometiendo mayo
con verdes pimpollos
rojos y encarnados
Se diría que mientras cantamos, los bancos, y hasta el Coro del Calvario, han sido ocupados por las almas de aquellos que ya se fueron, y que nos enseñaron el mágico cántico. Y en sus etéreos e imprecisos rostros se dibuja una sonrisa de satisfacción, mientras nos miran con sepulcral silencio y comprueban que seguimos sus enseñanzas...
Encarnada rosa
feliz primavera
los que han de cantarte
tu licencia esperan
Así, lentas e imparables, van siendo cantadas las estrofas que salen de las emocionadas gargantas, mientras los acordeonistas aprietan con fuerza sus fuelles para que su sonido se oiga a través de las hermosas voces masculinas...
Tus pechos Señora
son dos fuentes claras
donde yo bebiera
si Tú me dejaras
! Qué hermosura amigos, vivir esos mágicos momentos, entre personas que hemos ido juntos a la escuela, bailado en las fiestas, asistido a entierros y nacimientos, y ahora aquí, con nuestros hijos y nietos mayores cantando, y los más pequeños sentados todos juntos en un banco, que parecían pajarillos en un cable, atentos a lo que hacen los mayores!
Hechicera dama
aquí esta señora
María de nombre
de este pueblo Aurora
Y así, estrofa tras estrofa, piropo tras piropo, vamos llegando al final del mayo cantado en la Ermita del Calvario, al término del cual bajamos en alegre e informal procesión a nuestra pequeña Catedral. Nuestra Iglesia.
No tengo palabras amigos, para describir la emoción de cantar y tocar los mayos en este sagrado sitio, en el que la acústica multiplica los sonidos. Yo diría que vi los bancos llenos de almas que con sus sublimes e impalpables figuras nos contemplaban mientras sonreían y movían sus labios...! Eran los nuestros! nuestros padres, hermanos abuelos, tíos, amigos y demás familia que nos precedieron en el camino al más Allá, y acudieron a la Iglesia llamados por el mágico cántico...
Adiós alhelí,
adiós azucena,
adiós clavelina,
adiós rosa bella.
! Hasta las golondrinas hicieron eco del popular acontecimiento, al día siguiente!
! Grande y hermoso el cántico de los mayos, y grandes las gentes amantes de las Tradiciones!
Gracias amigos/as. Hasta pronto, y siempre con su recuerdo.
Manuel.
No podía ser de otra forma amigos/as de Facebook y de la Ventosa.
El ambiente festivo que habíamos creado en nuestro pueblo el día 29 de abril con la Misa y Procesión, y la comida de Hermandad seguida de cena y baile, nos había dejado un regusto y el deseo de seguir disfrutando juntos el día 30.
! Y qué mejor forma de hacerlo que cantando los Mayos!
AAAAAh, los Mayos... ese cántico ancestral y hermoso que es una loa a la Virgen María, personificada en cada mujer.
Viene tu galán
prometiendo mayo
con verdes pimpollos
rojos y encarnados
Ese cántico de alabanza que nuestros antepasados dedicaban con entusiasmo e ilusión a su amada, bajo su balcón o ventana, con la mirada fija y el corazón agitado, esperando ver encenderse la luz y ser oído por Ella...
Son las doce en punto de la noche, y dentro de nuestra Ermita el Calvario, comienzan los cánticos. Empiezan los hombres con sus vozarrones que rebotan sobre las bóvedas de la Ermita, inundan el recinto sagrado, y salen por las puertas abiertas extendiéndose por el valle y los campos verdes y oscuros. Hasta las palomas de la Ermita, y los pájaros del campo, se despiertan y rebullen en sus nidos, sin decir ni pío extasiados por el bello cántico.
Estamos a treinta
del abril cumplido
alegraos mozas
que mayo ha venido
Y contestan las mujeres que con sus finas voces, suavizan con encanto nuestro sentido del oído:
Mayo bien venido
a este pueblo sea
que con su venida
las damas se alegran
Tres acordeones acompañan a los cantores, poniendo con sus acompasados acordes el complemento musical, que se extiende e inunda la Ermita y los campos, y eriza los cabellos acelerando los corazones de los presentes...
Viene tu galán
prometiendo mayo
con verdes pimpollos
rojos y encarnados
Se diría que mientras cantamos, los bancos, y hasta el Coro del Calvario, han sido ocupados por las almas de aquellos que ya se fueron, y que nos enseñaron el mágico cántico. Y en sus etéreos e imprecisos rostros se dibuja una sonrisa de satisfacción, mientras nos miran con sepulcral silencio y comprueban que seguimos sus enseñanzas...
Encarnada rosa
feliz primavera
los que han de cantarte
tu licencia esperan
Así, lentas e imparables, van siendo cantadas las estrofas que salen de las emocionadas gargantas, mientras los acordeonistas aprietan con fuerza sus fuelles para que su sonido se oiga a través de las hermosas voces masculinas...
Tus pechos Señora
son dos fuentes claras
donde yo bebiera
si Tú me dejaras
! Qué hermosura amigos, vivir esos mágicos momentos, entre personas que hemos ido juntos a la escuela, bailado en las fiestas, asistido a entierros y nacimientos, y ahora aquí, con nuestros hijos y nietos mayores cantando, y los más pequeños sentados todos juntos en un banco, que parecían pajarillos en un cable, atentos a lo que hacen los mayores!
Hechicera dama
aquí esta señora
María de nombre
de este pueblo Aurora
Y así, estrofa tras estrofa, piropo tras piropo, vamos llegando al final del mayo cantado en la Ermita del Calvario, al término del cual bajamos en alegre e informal procesión a nuestra pequeña Catedral. Nuestra Iglesia.
No tengo palabras amigos, para describir la emoción de cantar y tocar los mayos en este sagrado sitio, en el que la acústica multiplica los sonidos. Yo diría que vi los bancos llenos de almas que con sus sublimes e impalpables figuras nos contemplaban mientras sonreían y movían sus labios...! Eran los nuestros! nuestros padres, hermanos abuelos, tíos, amigos y demás familia que nos precedieron en el camino al más Allá, y acudieron a la Iglesia llamados por el mágico cántico...
Adiós alhelí,
adiós azucena,
adiós clavelina,
adiós rosa bella.
! Hasta las golondrinas hicieron eco del popular acontecimiento, al día siguiente!
! Grande y hermoso el cántico de los mayos, y grandes las gentes amantes de las Tradiciones!
Gracias amigos/as. Hasta pronto, y siempre con su recuerdo.
Manuel.
Hola, Manuel y amigos/as del foro. Manuel, que descripción más poética y bonita haces del canto de los MaYOS en esa noche mágica que tantos nostálgicos
recuerdos trae a mi memoria. Aquí cantábamos primero los MAYOS a la Virgen en la Iglesia, muy solemnes, y después salíamos por las calles a cantar los
MAYOS a las mozas debajo de sus ventanas. Algunas, agradecidas, nos echaban unas bolsa de caramelos, alguna otra nos bajaba la botella del Anís para que
afinásemos más las gargantas. De todo esto ya no queda nada más que el recuerdo, pues cuando los mayores lo hemos dejado, los jóvenes no han seguido-
¡Que pena!
Saludos Cordiales
ABACO
recuerdos trae a mi memoria. Aquí cantábamos primero los MAYOS a la Virgen en la Iglesia, muy solemnes, y después salíamos por las calles a cantar los
MAYOS a las mozas debajo de sus ventanas. Algunas, agradecidas, nos echaban unas bolsa de caramelos, alguna otra nos bajaba la botella del Anís para que
afinásemos más las gargantas. De todo esto ya no queda nada más que el recuerdo, pues cuando los mayores lo hemos dejado, los jóvenes no han seguido-
¡Que pena!
Saludos Cordiales
ABACO