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BELMONTE: Reflexión...

Reflexión

Erase un arriero manchego que por la noche hablando su mujer y en presencia de su perro, le decía a esta mañana tengo que ir al molino para moler una fanega de cebada para hacer tortas para el perro, y cogeré la mañana, porque con la fresca el borrico va más fresco.

Por la mañana de aquel lunes Isidoro que es como se llamaba el arriero cogió la mañana y bajo al establo y echándole la cabezada a su burro lo saco del establo le puso la albarda y le cargo la fanega cebada y le dijo hoy iremos al molino que esta casi dos kilómetros del pueblo, pues su perro Chusqui miraba al arriero atentamente como atalajaba a su buro Macedonio que era como le llamaba al burro.

Luego hecho andar y su perro Chusqui lo seguía abrió las portadas y salió con su burro a la calle y una vez allí cerro las portadas con la aldaba y se monto en el burro y empezó a caminar en dirección al molino, pero el burro como todavía era de noche iba despacio, pero al arriero le vino la frase con que castigar a su burro Macedonio y empezó a decir arre borrico que te mato.

En esto que paso por al lado de una zarza que había en la orilla del camino donde dormitaba un cuervo y al oír arre borrico que te mato el cuervo empezó a seguir al arriero y su cabalgadura su pero les seguía pero no daba importancia a la frase del borrico que te mato pero mire Usted, el cuervo se lo tomo en serio pensando que aquella mañana se daría un hartazgo de carne, pero

Llegaron al molino y el cuervo vio que la palabra del arriero era mentira entonces levanto el vuelo graznando y DIJO DE PICO MATA EL ARRIERO AL BORRICO

Del poeta de Belmonte