3 meses GRATIS

BELMONTE: Reflexión...

Reflexión

“Desde el fondo del corazón presento mis suplicas a vos Señor”

Decía Blas Pascal, que había verdades de razón y verdades de corazón, la razón es fría en calculadora y es reflexiva y tiene muchas cosas en cuenta cuando tiene que emitir un juicio.

Las verdades de corazón, son verdades espontaneas se parecen a esa madre que le dice a su niño pero que guapo eres, te quiero bonito y hace reír al niño o a la niña de corta edad, y es que este te quiero sale del corazón de la madre a su hijo que lo quiere y le dice cosas bonitas, como cuando somos mayores y estamos en edad de la adolescente y nos susurran al oído la muchacha con la cual nos relacionamos y nos dice te quiero, este tequiero nos llega al alma y nos quita el amargor de la vida y nos volvemos niños, porque el amor nos hace niños cuando este es sincero.

Hay que ver efecto del amor cuando oramos ante el Señor y le pedimos que aumente nuestra fe en el, que es un amor que nos llena y que nosotros nos dejamos querer por el Señor que escucha nuestra oración y el Señor sabe muy bien lo que necesitamos y lo que nos hace falta en la vida para ser felices, y esta felicidad la encontramos en nuestro interior, que es ahí donde el Señor nos habla y nos da paz y cuando nos acostamos vemos que el Señor nos da un sueño reparador.

En paz me acuesto y duermo porque solo tu Señor me dejas vivir tranquilo, todo esto es un camino que hay que descubrirlo día a día mediante la oración y la meditación, tener un rato para encontrar el dialogo con el Señor, porque el siempre nos esta esperando y no se cansa de esperar, la oración junto con la meditación asiduo son dos columnas en las cuales encontraremos la fuerza deseada para que no nos lleve el viento de la relatividad, el cristiano es un Viator es un caminante que parte de un punto y llega a otro punto donde esta el ocaso y donde lo recogerán otros viajeros que llegaron antes que él.

12.03-24... (ver texto completo)