Luz ahora 0,07700 €/kWh

BELMONTE: La ley de la compensación...

La ley de la compensación

Cuento

Se dio el caso que un buen día de hace muchos siglos se dio un baile en Paris y asistían a el lo más granado de la nobleza francesa y algún que otro soldado venido de otras lejanas tierras, pero al baile invitaron a un soldado español de los tercios del gran capital que por aquellas fechas se dilucidaba cuales de los soldados eran los mejores, y los franceses siempre se ponían en primera fila creyéndose que eran los más arrojados y valientes cosa que por otra parte no era verdad.

El soldado español cuando recibió la oferta de invitación al baile no se amilano sino que fue al baile con intención de pasar una buena velada aunque no se encontraba entre amigos, los soldados franceses cuando lo vieron de llegar, fueron hacia él y le dijeron que había un francesita que quería que el soldado que le pidiese el primer baile debía regalarle una rosa que había colgada en la pared a bastante altura.

Cuando esto le dijeron a don Pedro que es así como el soldado español se llamaba acepto la apuesta y yendo donde estaba la rosa en compañía de aquellos soldados pedantes que intentaban reírse de su menguada estatura sacando su espada dijo: Cuando un español no alcanza con la mano, alcanza con la punta de su espada y dio un mandoble y la rosa se la llevo a madmuasel que le concedió el primer baile quedándose los franceses con tres palmos de narices.