comentario
Lo bueno, lo bello y lo conveniente:
Lo bueno: puede ser bello, pero no ser conveniente.
Lo bello: puede ser conveniente, pero no puede ser bueno.
Lo conveniente: puede ser bello, pero no es bueno.
Como vemos la cosas de provecho han de basarse en este tres acepciones: Lo bueno, lo bello y lo conveniente,
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Anécdota
Se cuenta del poeta Publio Virgilio Marón, más conocido como Virgilio que tenía por costumbre ponerse a escribir a temprana hora de la mañana y estaba hasta la hora de comer y por la tarde solía borrar casi todo lo que había escrito por la mañana.
Anécdota
Se cuenta del poeta Publio Virgilio Marón, más conocido como Virgilio que tenía por costumbre ponerse a escribir a temprana hora de la mañana y estaba hasta la hora de comer y por la tarde solía borrar casi todo lo que había escrito por la mañana.
Incluso mando que a su muerte quemaran toda la obra que había escrito, pero ya se encargo el emperador Octavio de recogerla y ponerla a buen recaudo para que no se perdiese ni una coma de los escritos de Virgilio.
La belleza en el ángulo
Si la mañana es larga
La tarde será corta
Lo bueno, lo bello y lo conveniente:
Lo bueno: puede ser bello, pero no ser conveniente.
Lo bello: puede ser conveniente, pero no puede ser bueno.
Lo conveniente: puede ser bello, pero no es bueno.
Como vemos la cosas de provecho han de basarse en este tres acepciones: Lo bueno, lo bello y lo conveniente,
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Se cuenta del poeta Publio Virgilio Marón, más conocido como Virgilio que tenía por costumbre ponerse a escribir a temprana hora de la mañana y estaba hasta la hora de comer y por la tarde solía borrar casi todo lo que había escrito por la mañana.
Anécdota
Se cuenta del poeta Publio Virgilio Marón, más conocido como Virgilio que tenía por costumbre ponerse a escribir a temprana hora de la mañana y estaba hasta la hora de comer y por la tarde solía borrar casi todo lo que había escrito por la mañana.
Incluso mando que a su muerte quemaran toda la obra que había escrito, pero ya se encargo el emperador Octavio de recogerla y ponerla a buen recaudo para que no se perdiese ni una coma de los escritos de Virgilio.
La belleza en el ángulo
Si la mañana es larga
La tarde será corta