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PUERTOLLANO: Siento lo de tu hombro Antonio, pero veo que el remedio...

¿Que si merece la pena?, pues claro que lo merece, pero si eso es nuestra esencia, nuestros recuerdos, nuestra vida, vamos que es todo, ademas asi mantenemos la mente en activo y la hacemos trabajar para que no le entren telarañas al disco duro, asi que ya sabes, que esa duda no te entre nunca más y sigue escribiendo, que bien merece la pena...

un abrazo

LOLI GÓMEZ, CUBERO Y DEMÁS, mi hombro no es nado del otro mundo, solo que no debo coger peso y eso, con la que tengo encima, es imposible.

Bueno, EMILIANA, ENRIQUETA, AMPARO (Por cierto, como van las comisiones) BETRAL, CONCHI, LIBERTAD y todos los amigos del foro, vaya líos que me metéis, no tengo ni idea de quien es la poesía de los PASOS. Por una parte me parece de LOLI, por otra no me parece, así que aclarármelo. Yo que acabo de venir de arreglar mis asuntos, os dejo mis propios PASOS. Están calentitos, acaban de pasearse por mi calle.

UN SALUDO A TODOS.

TUS PASOS

Cada vez que escucho pasos
Venir por la calle abajo
Mi corazón se desboca
Y parar, cuesta trabajo

Mis oídos son tan finos
Que los puede distinguir
De los pasos de vecinos
Que transitan por aquí

Tus pasos son como el viento
Aunque no los pueda ver
Se que vienen calle abajo
O calle arriba, tal vez

Me traen tus bellos olores
El color de tus mejillas
Ese rubí de tus labios
Y esas lindas pantorrillas

Presiento venir tus pasos
Cuando sales de paseo
Cuando pasan por mi puerta
Con su dulce taconeo

Son como pies de princesa
Por los que pierdo el aliento
Son como esas nubes blancas
Que se mecen con el viento

Tus pasos son como flores
Del jardín de la ilusión
Son pétalos de una rosa
Clavada en mi corazón
A. E. I.

Siento lo de tu hombro Antonio, pero veo que el remedio lo tienes muy difícil, si ves el comentario de Amparo (mi hermana) también cuenta de problemas de dolores, que claro ya se les suponía a ella y su marido, después de muchos años cuidando a su suegra, como tú y con la misma dolencia, yo les decía que el día que ella marchara, los dejaría para pocos bailes y por desgracia, no me equivoqué.

Tus pasos me han gustado mucho, me han traído recuerdos de otros tiempos, cuando teníamos dormitorio a la calle y viviendo en casa de planta baja, reconocía a tod@s en su caminar, horarios y porqué no, hasta rondando, jejej.