lugar mágico, PUERTOLLANO

Buenas noches Pedro, gracias por tus deseos, pero ya sabes, las noches aunque sean tranquilas, son largas y más en el hospital que son 10 h de trabajo.

Pero es lo que hay y siempre dando gracias de que tenemos trabajo, no me refiero a tener pacientes, ya que siempre digo que me gustaria me pagaran por no hacer nada, señal de que todo el mundo estaba sano. Pero eso es imposible, claro. Aunque te digo, que mi trabajo me gusta y cien veces que naciera, cien veces que lo haria

Un abrazo
Maria, si te contara que camino del hospital, (ya que me he venido andando como te dije), me he venido acordando de ti, no sé si me creerás. Cada vez que me encontraba una pareja con un bebé, lo miraba, se me escapaba una sonrisa y pensaba... como Pablo. Te imaginaba con el por nuestro paseo.. Total, ya mismo os vemos a los dos abuelos más anchos que largos, con el nieto

Un beso guapa
Haber niñas, que es eso que me ha parecido escuchar sobre invitarme a comer cosas raras.

Si a mi no es que no me gusten las lentejas, lo que sucede es que no las quiero, pero si algún día como me tiene pasado me invitan a comer y las hay, pues entonces me apreto dos platos de ellas.

Recuerdo cuando me mandaba mi madre a comprarlas a casa Colado, además de comprarlas luego me tocaba limpiarlas y desde entonces les tengo manía, pero si las hay que comer se comen, pero comer para na…..
Emi, de no ser por el fútbol, ya te habría dicho Cubero como de cuanto le gustan las lentejas jejej.

Sobre la Virgen de los Desamparados, he de decirte que, cuando mi hijo marchó a vivir allí, alquilamos vivienda entre la calle San Vicente y Calle de la Paz, por tanto, la plaza de la Reina y la Basílica, nos pillaba a un paso de nada y lo cogimos de costumbre el ir a visitarla a nuestra llegada y nuestra marcha, ahora tenemos casi 15 minutos de camino, pero seguimos con la costumbre, bajo su protección...
buenas tardes foreros, MARIA yo tambien estoi orgullosa de tener tantos hermanos como bien dices, mi padre siempre hacia el recuento antes de empezar a comer y si la vida no era como la de ahora, pero te puedo asegurar que hambre en casa no se pasaba eso si no habia nada de galgerias, cuando nos apretaba el hambre cojiamos un trozo de patatera y un trozo de pan y ajugar al campo de futbol, ya sabes cuando vuelvas por valencia no dudes en llamarme, y nos tomaremos ese chocolate con churros en la plaza...