Hola a todos,
Soy Cristina, y vivo en Barcelona. Soy nieta del "Tirantes" y Fidela, y hija del "Orejetas". Hace ya muchos años que no voy por la "Puebla", pero mis padres, hermano, cuñada y sobrinos estuvieron el año pasado en verano, para ver como estaba el pueblo y que mis sobrinos conocieran la casa de su abuelo y tatarabuelos.
Creo que la casa aún está en pie. Mis abuelos vivían en la casa debajo de la torre, en una calle muy empinada.
De mis veranos allí recuerdo que la vecina tenía una gata siamesa que no se separaba de nosotros en todo el verano, que enfrente de la casa de mis abuelos se hacía matanza, de las miles y miles de veces que jugábamos al escondite por las noches en la plaza y alrededor de la iglesia, de las excursiones al "Calar", pasando la tarde sentados en una roca en lo alto, mirando las llanuras.
Tiernos recuerdos que seguramente todos habremos compartido.
Un abrazo a todos los Poblatos,
Cristina González.
Soy Cristina, y vivo en Barcelona. Soy nieta del "Tirantes" y Fidela, y hija del "Orejetas". Hace ya muchos años que no voy por la "Puebla", pero mis padres, hermano, cuñada y sobrinos estuvieron el año pasado en verano, para ver como estaba el pueblo y que mis sobrinos conocieran la casa de su abuelo y tatarabuelos.
Creo que la casa aún está en pie. Mis abuelos vivían en la casa debajo de la torre, en una calle muy empinada.
De mis veranos allí recuerdo que la vecina tenía una gata siamesa que no se separaba de nosotros en todo el verano, que enfrente de la casa de mis abuelos se hacía matanza, de las miles y miles de veces que jugábamos al escondite por las noches en la plaza y alrededor de la iglesia, de las excursiones al "Calar", pasando la tarde sentados en una roca en lo alto, mirando las llanuras.
Tiernos recuerdos que seguramente todos habremos compartido.
Un abrazo a todos los Poblatos,
Cristina González.