Marce, bonita historia cuentas de Miguel Hernández y la chica de Mestanza, preciosa poesia, miraré el blog que nos dices.
Lo que cuentas de tu hermano Eduardo también me gusta saberlo, anímalo a que nos ponga en el foro sus poesias, a más de uno nos gustaria, dile que deje atrás su pudor y timidez y nos de opción a poder leerlas.
Un beso.
Pues verás, Pepi, lo de mi hermano y que publique sus poesías es tarea imposible.
¡Si ni tan siquiera somos capaces, en las
reuniones familiares, de hacerle que nos toque y nos cante algo! Y de
joven era un pedazo de guitarrista y cantante.
Lo invité como colaborador a mi Blog y no ha escrito más que un comentario a mii primera entrada. Ni una colaboración más, y eso que se le da de miedo.
En fin, qué le vamos a hacer, cada uno es como es.
Besotes.