Esta fotografía es de lo más común y coincidente, por tanto, en cualquier punto de España, que no distingue a nadie en particular, pero que sirve de reflejo en la piel de toro donde hemos nacido, sobre todo en época de fiestas. Poco o nada he de añadir sobre el particular, pero sí aprovechar este espacio, para animarnos todos y que seamos constructivos, que aquello que nos une, suele ser lo más extenso, lo más universal, problemas que con el día a día nos rodean y que por cotidianos, no los queremos hacer nuestros, pero que en el fondo cambian de lugar y de personas y nos afectan a todos. Decía una sabia persona de edad avanzada, después de una delicada operación a un joven con quién compartía habitación: Por ley de vida a mi me queda poco para poder coincidir contigo aunque sea telefónicamente, pero siempre recuerda que cuando mires a la luna, donde quiera que yo esté, habrá momentos en que concidiremos porque para mí es un punto de encuentro en momentos agradables de mi vida. Si aquello que es amplio, lo reducimos, podemos ver en Almuradiel aquella luna, aquel punto de encuentro. Un saludo para todo el que sea positivo.
