Aquí aparece de nuevo Diego bebiendo
agua, de uno de los
caños de la
fuente de Moroso para saciar su sed después de haber correteado por aquelos bonitos parajes, silenciosos y tranquilos ya que cuesta ver incluso pájaros, creo se han ido al no haber humanos desde los años 60, lo que si pudimos ver, aunque de lejos, un bonito Zorro.