desde el parador, CARMONA

Merece la pena detenerse por unos segundos en el parador, ya en la lejanía sus paisanos me comentaron que unos estaban más contentos que otros con el pueblo, a mí me parecieron campechanos y buenas gentes, me gusto aun ver personas con albarcas y otros trabajando la madera como en otros tiempos.
(3 de Junio de 2012)