CARMONA.Afluente del Nansa por la margen derecha.
Se le conoce también por el nombre de Quivierda y se forma con la afluencia de tres arroyos que se unen en el mismo pueblo:río de San Pedro, río de la Jaza el Bau y río del Perujo.Hasta su unión con el Nansa recorre aproximadamente una longitud de 7, 2 kilómetros.
El lugar de confluencia es Puentenansa, en el municipio de Rionansa.
(Gran Enciclopedia de Cantabria).
Apariciucu, eres todo un poeta, imbuido sin duda por el espíritu del gran Manuel Llano.
Gracias, muchas gracias, por la agridulce vorágine de emociones, nostalgias y recuerdos que nos despiertan tus escritos.
A la izquierda La Nozaléa y la Carpeza y al fondo el Robréu, a la derecha el río y la "vaéra la Pesa".
Es una fotografía muy bonita y trae a la memoria manos heladas de niño que humeaban al meterlas en la boca para darles calor, la pesadez de la nieve que se acumulaba en las abarcas y había que sacudirlas conta las paredes, establos cálidos donde rumiaba el ganado y echaban una "cigarrá" nuestros adultos observadores de cuanto acontecía dentro y fuera de la estancia, camas calientes con pesadas...
Los paisajes van cambiando como las personas pero siempre permanece lo fundamental, lo que da identidad.
Se le conoce también por el nombre de Quivierda y se forma con la afluencia de tres arroyos que se unen en el mismo pueblo:río de San Pedro, río de la Jaza el Bau y río del Perujo.Hasta su unión con el Nansa recorre aproximadamente una longitud de 7, 2 kilómetros.
El lugar de confluencia es Puentenansa, en el municipio de Rionansa.
(Gran Enciclopedia de Cantabria).
Apariciucu, eres todo un poeta, imbuido sin duda por el espíritu del gran Manuel Llano.
Gracias, muchas gracias, por la agridulce vorágine de emociones, nostalgias y recuerdos que nos despiertan tus escritos.
A la izquierda La Nozaléa y la Carpeza y al fondo el Robréu, a la derecha el río y la "vaéra la Pesa".
Es una fotografía muy bonita y trae a la memoria manos heladas de niño que humeaban al meterlas en la boca para darles calor, la pesadez de la nieve que se acumulaba en las abarcas y había que sacudirlas conta las paredes, establos cálidos donde rumiaba el ganado y echaban una "cigarrá" nuestros adultos observadores de cuanto acontecía dentro y fuera de la estancia, camas calientes con pesadas...
Los paisajes van cambiando como las personas pero siempre permanece lo fundamental, lo que da identidad.