Casi a vista de pájaro, VILAFLOR

La leyenda de la flor de Chasna, Vilaflor: La tradición cuenta que uno de los capitanes de Lugo, de nombre Pedro Bracamonte, descubrió en el barranco de Chasna a una bellísima muchacha aborigen, a la que por su cautivadora belleza llamaban la Flor de Chasna, y la hizo prisionera. La doncella, luego de unos días de cautiverio logro escaparse, pero el capitán, prendado de los encantos de la bella fugitiva, no pudo soportar su pérdida y enloquecido de amor, y pese a los cuidados de sus soldados, después de tres meses de suspirar por la bella aborigen y de repetir! Vi la flor del valle!, ¡Vilaflor!, murió evocando a su amada. Desde entonces, este pueblecito verde y montañoso, tomo el nombre Vilaflor hasta nuestros días.
(15 de Julio de 2019)