Ruta circular por el Macizo de Anaga. El bosque de Laurisilva está compuesto de grandes árboles y plantas trepadoras, cuyas hojas se parecen a las del laurel (hojas lanceoladas, muy anchas, duras y perennes), de lo que deriva el mencionado nombre de Laurisilva. Los Alisios, de componente noreste, son los vientos dominantes en Canarias. No son vientos que suelen originar lluvias abundantes, pero si están cargados de humedad. Cuando éstos vientos ascienden por las laderas de las montañas más altas, el aire húmedo se condensa y se forman masas nubosas, denominadas “Mar de Nubes”. Estas formaciones reducen y suavizan las temperaturas. Es en este entorno donde ha sobrevivido la Laurisilva, que es una formación boscosa compuesta de especies con hojas de tipo laurel (viñátigos, tiles, sanguinos, laureles, barbusanos, adernos, mocanes, delfinos y palos blancos), perennes y que se corresponden con las zonas orientadas al norte, entre 400 y 1200 metros de altitud. Con temperaturas muy suaves durante todo el año, entre 12º y 14º C de media, y sin abundancia de precipitaciones, es el bosque de Laurisilva el que actúa de esponja, atrapando el agua entre su densa vegetación y aportando gran cantidad de agua al suelo.
(12 de Julio de 2019)