Casa Urtusáustegui, LA OROTAVA

El grupo dominante favoreció la construcción de conventos para el establecimiento de las órdenes religiosas, de la barroca Iglesia Matriz de la Inmaculada Concepción y de una refinada arquitectura canaria y renacentista de viviendas y mansiones con amplios jardines, notables fachadas y escudos de armas, blasones nobiliarios en piedra que seña­laban el linaje al que pertenecía su propietario. Por su parte, el Farrobo pudo tener su templo, la Iglesia de San Juan, aunque por falta de ingre­sos y recursos, las obras se alargarían mucho y no la verían terminada hasta el siglo XVIII. El resultado fue la formación de una ciudad de gran belleza visual. La Villa de La Orotava comienza a ofrecer una imagen lustrosa que tiene su correlato en su encantador valle tapizado por un inigualable verde que se extiende desde las montañas hasta las orillas de su costa atlántica y vigilado por el volcán del Teide.
(13 de Julio de 2019)