La más famosa de estas cámaras es la llamada «Reina de las
Columnas», una gigantesca estalagmita de más de 20 metros de altura que se alza majestuosamente en el centro de una de las salas. El recorrido por las
Cuevas de Artà también está iluminado de manera artística, lo que permite a los visitantes apreciar plenamente la magnitud y la belleza de las formaciones geológicas.