Una
excursión que combina
naturaleza y gastronomía típica local. Para no perderse ningún detalle de la ruta y extremar la precaución, las visitas a la
cueva se realizan en pequeños grupos con un máximo de 25 personas acompañadas por un guía que irá explicando, de forma divertida y didáctica, todo lo relacionado con el descubrimiento de la
gruta, de qué materiales está formada, sus extravagantes formas y otros muchos datos relevantes.