Las obras de la
catedral comenzaron a finales del siglo XIII y se mantuvieron durante tres siglos y medio. El primer arquitecto del proyecto fue Ponç des Coll, quien comenzó construyendo la
capilla de la Trinidad, al este. A Ponç le siguió en el cargo Jaime Fabre, arquitecto también de la
iglesia de
Santo Domingo de Palma y de la catedral de
Barcelona.