El
Salón del Tinell. Este gran salón fue dividido en dos plantas a raíz de la caída de su techo en 1578. Pere Castany fue el arquitecto que llevó a cabo su reacondicionamiento por orden de Felipe II. Ahora, en la planta baja pueden distinguirse tres estancias (la de
Chimeneas, la de Consejos y la del Recibidor), localizándose en la planta superior el Salón del Trono, un amplio espacio diáfano seccionado por enormes
arcos ojivales y decorado con tapices flamencos.