El
Palacio de la Diputación de
Barcelona, también conocido como el Palau de la Generalitat, tiene sus raíces en la Edad Media. La construcción del
edificio comenzó en el siglo XV, específicamente en 1400, bajo la dirección del maestro de obras Marc Safont. Este periodo de la
historia catalana se caracteriza por un florecimiento
artístico y cultural, y el palacio no es una excepción. El estilo arquitectónico predominante del palacio es el
gótico, aunque a lo largo de los siglos ha incorporado elementos de otros estilos, como el renacentista y el barroco.