¡Vaqueru! ¿Sabes que día es hoy?... ¡Dios!, si parece que fue ayer... Y ¿sabes, Vaqueru?, estuve pensando y creo que es un buen día para desaparecer contigo.
Verás, fui feliz estos años... a mi manera, con mi sueño imperecedero pero... cansé de soñar, Vaqueru, cansé de vivir de una ilusión. Lo que quiero ahora es una realidad que, seguramente, no va a ser eterna, pero... ¡voy a por ella! Voy a cambiar nostalgía por audacia y vivir el presente.
Adiós a todos/as. El Vaqueru y yo desaparecemos para siempre.
Verás, fui feliz estos años... a mi manera, con mi sueño imperecedero pero... cansé de soñar, Vaqueru, cansé de vivir de una ilusión. Lo que quiero ahora es una realidad que, seguramente, no va a ser eterna, pero... ¡voy a por ella! Voy a cambiar nostalgía por audacia y vivir el presente.
Adiós a todos/as. El Vaqueru y yo desaparecemos para siempre.
¡Nunca digas... nunca jamás!
Pues bien, aquí estoy de nuevo... yo sigo...
Hace un año decidí desaparecer con el vaqueru, o más exactamente, con el recuerdo del vaqueru, pues el pobre hace años que cambió de estado. Como toda materia ni se creó ni se destruyó, pasó a ser... otra cosa... ¡quien sabe qué!
Decidí dejar de soñar con el pasado, cambiar mostalgia por audacia e ir en busca de una realidad que me hiciera feliz... en el presente.
¡Conseguido! Fue un largo camino, dificil, pues hubo momentos de soledad, de desánimo, de desconfianza en mis posibilidades, de dudas... pero os aseguro que mereció la pena.
Viví una realidad que superó cualquier sueño, que me dejó tan plena, tan feliz... que ya no puede haber nada mejor en mi vida. Una realidad que me permite pasar todas las páginas de mi pasado, que me permite recordar al vaqueru con cariño, pero... sin añoranza, sin pena por lo que pudo haber sido y no fue...
¿Qué pasará a partir de ahora?... Pase lo que pase... será... otra historia.
Pues bien, aquí estoy de nuevo... yo sigo...
Hace un año decidí desaparecer con el vaqueru, o más exactamente, con el recuerdo del vaqueru, pues el pobre hace años que cambió de estado. Como toda materia ni se creó ni se destruyó, pasó a ser... otra cosa... ¡quien sabe qué!
Decidí dejar de soñar con el pasado, cambiar mostalgia por audacia e ir en busca de una realidad que me hiciera feliz... en el presente.
¡Conseguido! Fue un largo camino, dificil, pues hubo momentos de soledad, de desánimo, de desconfianza en mis posibilidades, de dudas... pero os aseguro que mereció la pena.
Viví una realidad que superó cualquier sueño, que me dejó tan plena, tan feliz... que ya no puede haber nada mejor en mi vida. Una realidad que me permite pasar todas las páginas de mi pasado, que me permite recordar al vaqueru con cariño, pero... sin añoranza, sin pena por lo que pudo haber sido y no fue...
¿Qué pasará a partir de ahora?... Pase lo que pase... será... otra historia.
