Esta cancela da acceso a la parte de atrás del antiguo obrador de Gersán. Hoy el olvido y la hiedra han invadido el entorno del viejo
horno de leña, donde se cocían los preciados dulces. Un olor almibarado impregnaba la estancia y alrrededores.
Cual viejo
claustro de
ruinas medievales hoy podemos contemplar este abandonado lugar, por donde pasábamos de niños a la
pastelería, por la parte de atrás.