MIERES: EL ULTIMO CAMINO...

EL ULTIMO CAMINO

Para camino tan largo solo he de necesitar
mi memoria, mi esqueleto y mi identidad
para no retorceder, ni mirar atrás,
dejaré todo recuerdo bien guardado.
Para no cesar en el empeño
no tendré más remedio que ¡recordar!
Para olvidar el pasado
primero habré de perdonar
a quién me hirió, me engañó...
en fín ¡perdonar!
Para camino tan largo, peso no llevaré
ni compañía, ni ayuda, ¡nada!
nada más que mi memoria
nada más que mi esqueleto
nada más que mi identidad.
Habrá quién no lo comprenda,
quién injusta, me creerá
habrá, quién habiendome querido,
recordarlo no querrá.
Habrá quién creyo quererme
y lo sienta como una fatalidad
habrá, pudiera que lo hubiera,
que me quiso, y cobarde
de mostrarlo no fue capaz.
Para camino tan largo, quizás deje atrás
mi memoria, mi esqueleto, y ¿Por qué no?
¡También mi identidad!