lo flipas...
Es una maravilla de tranquilidad. Lo primero, reloj fuera. A comer cuando hay hambre. La gente es encantadora. Mejor en verano, pero en invierno los nervios desaparecen y es la mejor sensación que hay.
Los nacidos en San Juste nos sentimos emocionados ante la vision de nuestro pueblo, ha sido una grata sorpresa. Venid a visitarnos, merece la pena!