El día que mi
amiga Pili me ensenó su
pueblo, me quedé enamorada de él con sus
fachadas de
piedra, sus
chimeneas diferentes, sus
paisajes, sus gentes tan amables y buenas, sus
setas, su
agua buenísima y esas
casas que parecen
castillos: con suelo de piedra precioso, sus entradas
medievales... sus
bovedas ancestrales... si no has ido ves a
BESTUE, pueblo singular y precioso. Gracias Pili por vivir allí y que yo pueda tener un destino para ir al
cielo: BESTUE