Estos cantillaneros están colgaos con sus
virgenes, siempre discutiendo y peleando entre ellos, rivalizando en sus
fiestas a ver cual de ellas es más grande, más rudosa, más alcohólica... Parecen niños.
Ojalá y se olvidaran de esas tonterías. Podrían llegar a covertirían su
pueblo en un lugar tranquilo, alegre y pacífico dende vivir.
Acaso Dios no es UNO, acaso entenderá el sobre cual de los dos bandos lleva la razón... ¿No será que les pedirá cuentas por todo el odio y el veneno derramado
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