Esta
capilla está presidida por un gran lienzo de la ‘Inmaculada’, una obra atribuida a Mateo
Cerezo (1626-1666). Otros autores en cambio consideran que es obra de Claudio Coello. El
retablo, de madera sin policromar, es una recostrucción moderna (1944) del primitivo del s. XVIII. De la serie flamenca del x. XVII se encuentran en esta capilla las alegorías ‘Prudencia’ y ‘Esperanza’.