¿No creen que es fantástico esto de las elecciones? La administración local se pasa cuatro años sin tener una gorda que gastar en mejorar el pueblo y de golpe y porrazo, a un mes de las elecciones comienzan a gastar dinero a mansalva. ¡Ya sí hay pasta! Hay fondos para asfaltar calles, para cambiar alumbrado, para invitar a churros y toros a los ciudadanos; hay dineros para engañar al ciudadano y conseguir así su voto. La antigua administración era pésima pero esta deja mucho que desear. Todavía se puede hacer mucho mejor.