Aquí comienza, como en el señor de los anillos, la larga hazaña, que yo con mi perro bilbao, un dia no cualquiera, con lola y mariano(el de la venta del pino) nos adentramos en los inmensos bosques, en busca de la sierra segura, en busca de amores y sus colores, de luces y sus matices, de otoños con sus veranos, y primaveras en mi vida las primeras, en un dia de mucho divagar, saborear, enamorar, dialogar, los tres (locos enamorados), y hacia el camino de regresión, por la carretera del tranco, aun difuminados, con la brisa serrana, y el entorno, nos planteabamos: -que suerte ser de villanueva, con el desproporcionado dulce de su sierra. Os recuerdo os quiero . Pacho.