En 1918 viven en el camino de Pozo Ancho, cerca de la Fuente del Pisar de Linares, los hermanos Gabriel y Francisco Martínez Nieto, los dos trabajan en las minas y están casados con mujeres de Almería, Gabriel con Rosalía García, de Dalías, con la que tiene a Francisco y Francisco con Araceli Amat, de Félix, con quien tiene a Alejandro, Dolores, Trinidad, Josefa y Diego. Gabriel y Francisco son hijos de la sileña Simona Nieto Martínez, viuda que en 1902 vive sola en el número 9 de la calle Bailén de Linares con cerca de setenta años (ella llegó a Linares con treinta años y ya en el registro de 1881 aparece como viuda). El hijo más pequeño de Simona se llama Venancio y en unos censos aparece como Venancio Martínez Nieto, con los mismos apellidos que sus hermanoa, pero en otros aparece como Fernández Nieto. Por lo menos desde 1884 hasta 1898 vivió con Simona y sus hijos, la que pienso que sería la abuela de Gabriel (el mayor y el único nacido en Siles, de donde se fue con siete años, de los hermanos), Francisco y Venancio; la sileña María Martínez Ruiz, viuda que tiene más de cien años (de 103 a 108, según a qué documento le hagamos caso) y que por algunos detalles, como, por ejemplo, que llegó a Linares ocho años antes que Simona, pienso que era la suegra de Simona