Habia algunos carros, como dice Joseles, que eran verdaderas obras de arte. Claro, eran los que tenían los carpinteros; por eso el de su tío era tan bueno.
Llevaban hasta rodamientos en las ruedas; y, María, de cuerda estos, nada: Llevaban un buen volante.
Pues bien; un día, algunos nos salvamos de milagro. Bajábamos desde las escuelas montados unos cuantos, y al llegar a la calle que hay por debajo del ahora Bar de Maxi (entonces la fonda de la Pilar), estaba allí aparcado un camión de Panza. El conductor del carro no pudo superar la maniobra, y la parte derecha del tablero -recordareis que el tablero era bastante mas ancho que la parte delantera- pasó por debajo del tablero del camión. Afortunadamente, nos dimos cuenta a tiempo, y nos lanzamos dos o tres al suelo, antes de dar con nuestras cabezas en el camión. Salimos magullados, pero en eso quedó la cosa.
Saludos a todos.
Llevaban hasta rodamientos en las ruedas; y, María, de cuerda estos, nada: Llevaban un buen volante.
Pues bien; un día, algunos nos salvamos de milagro. Bajábamos desde las escuelas montados unos cuantos, y al llegar a la calle que hay por debajo del ahora Bar de Maxi (entonces la fonda de la Pilar), estaba allí aparcado un camión de Panza. El conductor del carro no pudo superar la maniobra, y la parte derecha del tablero -recordareis que el tablero era bastante mas ancho que la parte delantera- pasó por debajo del tablero del camión. Afortunadamente, nos dimos cuenta a tiempo, y nos lanzamos dos o tres al suelo, antes de dar con nuestras cabezas en el camión. Salimos magullados, pero en eso quedó la cosa.
Saludos a todos.
