Ya mismo estamos otra vez en Huesa, Semana Santa, comiendo Papa-jotes, Maimones, Talarines y gachas.
Parece que ya estoy oyendo por la calle la Iglesia el repicar de tambores, el olor a cera quemada, el silencio de la multitud en su cortejo funebre, a la luz de las velas, gestos cansados y condolidos.
Un manto de silencio cubre la calle Real.Un cortejo de velas blancas, suave y apagado és su resplandor, de negro los penitentes arrastran sus desnudos pies sobre el frio adoquin, un desgarrador llanto desciende de un viejo ventanal, el Ateo se estremece en su balcon.Con boinas en mano, cuerpos erguidos y con caras de circunstancias ven pasar su destino.
Noche de silencio, noche de vigilia.En silencio se les vio venir, en silencio pasarón y en silencio se enfilan calle arriba, calle que les llevara a su punto de partida.Los frios bancos de madera perseguidos son.Sera una larga noche, sera una noche de vigilia.
Un saludo muy cordial a todos y hasta otro dia.
Martinico.
Parece que ya estoy oyendo por la calle la Iglesia el repicar de tambores, el olor a cera quemada, el silencio de la multitud en su cortejo funebre, a la luz de las velas, gestos cansados y condolidos.
Un manto de silencio cubre la calle Real.Un cortejo de velas blancas, suave y apagado és su resplandor, de negro los penitentes arrastran sus desnudos pies sobre el frio adoquin, un desgarrador llanto desciende de un viejo ventanal, el Ateo se estremece en su balcon.Con boinas en mano, cuerpos erguidos y con caras de circunstancias ven pasar su destino.
Noche de silencio, noche de vigilia.En silencio se les vio venir, en silencio pasarón y en silencio se enfilan calle arriba, calle que les llevara a su punto de partida.Los frios bancos de madera perseguidos son.Sera una larga noche, sera una noche de vigilia.
Un saludo muy cordial a todos y hasta otro dia.
Martinico.