Frailes año 1954
Las carboneras sin nº, sin agua, sin luz; dos pequeñas habitaciones, que hoy tendrías que ser muy optimista para llamarlas a sí. Un hombre defenestrado por su opción en la guerra, una mujer que da alud dos mellizos teniendo ya cuatro retoños de dos, cuatro, (seis, yo) y ocho años. Ahí, en ese estado o situación. De ahí parten mis primeros recuerdos, veo como en un año muere; mi padre, mi abuela, un mellizo el otro, veo como tiene que trabajar esa madre, la mía, como sufre las carencias de los cuatro hijos que le quedan, como vivimos si se puede llamar así, en esas cuatro paredes con frio y goteras por doquier. Me veo por las calles de Frailes haciéndome visible cerca de las casas más pudientes y afines, para que sin tener que pedírselo, cosa que por mi timidez me era imposible, la que tenia voluntad, me preguntara Paquillo ¿qué te ha dicho tu madre que necesita hoy. Un poquito de aceite, unos garbanzos, un… apenas, entre susurros, conseguía trasmitirles el encargo que mi madre, en la ocasión y con la fuerza de la necesidad, me había hecho. Yendo todos los días a comer a la casa del secretario del pueblo acción acordada por su esposa para que, por lo menos, una vez al día el Paquillo fuera bien nutrido. A sí siguen mis recuerdos tengo seis años, soy el único varón y como se me da muy mal pedir, tengo que ponerme a trabajar.
Mures año 1956 (será el siguiente capítulo si queréis que os cuente mi vida) antes de votar a favor, pensar que tengo 63 tacos. AH y otra cosa, a veces creo, que amo tanto a Frailes por lo mucho que en él sufrÍ
Las carboneras sin nº, sin agua, sin luz; dos pequeñas habitaciones, que hoy tendrías que ser muy optimista para llamarlas a sí. Un hombre defenestrado por su opción en la guerra, una mujer que da alud dos mellizos teniendo ya cuatro retoños de dos, cuatro, (seis, yo) y ocho años. Ahí, en ese estado o situación. De ahí parten mis primeros recuerdos, veo como en un año muere; mi padre, mi abuela, un mellizo el otro, veo como tiene que trabajar esa madre, la mía, como sufre las carencias de los cuatro hijos que le quedan, como vivimos si se puede llamar así, en esas cuatro paredes con frio y goteras por doquier. Me veo por las calles de Frailes haciéndome visible cerca de las casas más pudientes y afines, para que sin tener que pedírselo, cosa que por mi timidez me era imposible, la que tenia voluntad, me preguntara Paquillo ¿qué te ha dicho tu madre que necesita hoy. Un poquito de aceite, unos garbanzos, un… apenas, entre susurros, conseguía trasmitirles el encargo que mi madre, en la ocasión y con la fuerza de la necesidad, me había hecho. Yendo todos los días a comer a la casa del secretario del pueblo acción acordada por su esposa para que, por lo menos, una vez al día el Paquillo fuera bien nutrido. A sí siguen mis recuerdos tengo seis años, soy el único varón y como se me da muy mal pedir, tengo que ponerme a trabajar.
Mures año 1956 (será el siguiente capítulo si queréis que os cuente mi vida) antes de votar a favor, pensar que tengo 63 tacos. AH y otra cosa, a veces creo, que amo tanto a Frailes por lo mucho que en él sufrÍ
Tremendo Belmontes. Son historias que dejan al que las escucha sin palabras y con un nudo en la garganta. Por mucho que yó quiera construir en mi imaginación cualquier escena como la que ha contado usted, ó cuentan las innumerables personas que como usted vivieron aquellas penurias, creo que no llega a ser ni una milésima parte de lo que fué la cruda realidad. Y aún así, con esa pequeñísima parte, consigo que se me pongan los pelos de punta. Por otro lado, es inevitable la comparación con los tiempos de hoy y el estado de bienestar que tenemos y que nos empeñamos en nó apreciar. No hacemos más que buscarnos problemas y dejarnos llevar por los tiempos que corren, por la avaricia y la envidia. Claro que en esos años que ustedes cuentan, la avarícia y la envidia tambien existian y siempre le tocaba sufrirla al pobre a la hora de ir a mendigar algo de comida para él y los suyos y así poder echar el día. La diferencia que había entre los que tenian y los que no tenían nada era abismal, tener dinero y poder por un lado y no tener nada que llevarte a la boca por otro.
Por eso creo que es importante echar un vistazo al pasado de mano o de boca de nuestros familiares ó amigos como usted y ver a lo que queda reducida la necesidad, ahora todos tenemos necesidad de hacer muchas cosas y abarcar más para tener más y más dinero y antes con solo sobrevivir era yá suficiente. No se deve de enterrar ese pasado, porque nos guste o nó forma parte de nosotros y de lo que somos y sería una falta de respeto hacia todos los que lo vivieron.
En fín que me alegro que la hayas compartido con nosotros. Esperaré impaciente el siguiente capitulo.
Un abrazo.
Por eso creo que es importante echar un vistazo al pasado de mano o de boca de nuestros familiares ó amigos como usted y ver a lo que queda reducida la necesidad, ahora todos tenemos necesidad de hacer muchas cosas y abarcar más para tener más y más dinero y antes con solo sobrevivir era yá suficiente. No se deve de enterrar ese pasado, porque nos guste o nó forma parte de nosotros y de lo que somos y sería una falta de respeto hacia todos los que lo vivieron.
En fín que me alegro que la hayas compartido con nosotros. Esperaré impaciente el siguiente capitulo.
Un abrazo.