Recuerdo que el antiguo colegio se llamaba "Francisco Franco". Con la construcción de aquel nuevo colegio (hoy ya tiene sus años) se inició una polémica a la hora de poner un nuevo nombre. Afortunadamente se acertó en el nombre: "Miguel Hérnandez". Con esto me despido por un tiempo del foro y de las fotos. Un saludo para todos.
Información de Carmen Moreno, alias Hannah
Durante este año, por ser el centenario de su nacimiento, nos acompañarán los poemas de aquel a quien nos arrebataron con treinta y un años, y nos silenciaron por más de cuarenta después de muerto. Aquel que amó la vida con pasión hasta la muerte, la suya y todas las vidas y las muertes. Aquel que lucho con la palabra, erigiéndola como arma de presente y de futuro. Aquel que hizo del pueblo oro puro, denunciando la injusticia y la vileza sin césar, haciendo de la libertad su fortaleza aún preso y perseguido y del amor un canto de vida hermoso y constante, aquel de ayer, de hoy y de siempre: Miguel Hernández.
Hoy les dejo dos poemas de él: El niño yuntero en versión cantada por Víctor Jara, video subido a YouTube por Barbara1987, que pueden escuchar clicando aquí y que, tal vez, sea una versión poco conocida, y "El niño de la noche" a continuación:
EL NIÑO DE LA NOCHE
De Miguel Hernández
“Riéndose, burlándose con claridad del día,
se hundió en la noche el niño que quise ser dos veces.
No quise más la luz. ¿Para qué? No saldría
más de aquellos silencios y aquellas lobregueces.
Quise ser... ¿Para qué?... Quise llegar gozoso
al centro de la esfera de todo lo que existe.
Quise llevar la risa como lo más hermoso.
He muerto sonriendo serenamente triste.
Niño dos veces niño: tres veces venidero.
Vuelve a rodar por ese mundo opaco del vientre.
Atrás, amor. Atrás, niño, porque no quiero
salir donde la luz su gran tristeza encuentre.
Regreso al aire plástico que alentó mi inconsciencia.
Vuelvo a rodar, consciente del sueño que me cubre.
En una sensitiva sombra de transparencia,
en un íntimo espacio rodar de octubre a octubre.
Vientre: carne central de todo lo existente.
Bóveda eternamente si azul, si roja, oscura.
Noche final en cuya profundidad se siente
la voz de las raíces y el soplo de la altura.
Bajo tu piel avanzo, y es sangre la distancia.
Mi cuerpo en una densa constelación gravita.
El universo agolpa su errante resonancia
allí, donde la historia del hombre ha sido escrita.
Mirar, y ver en torno la soledad, el monte,
el mar, por la ventana de un corazón entero
que ayer se acongojaba de no ser horizonte
abierto a un mundo menos mudable y pasajero.
Acumular la piedra y el niño para nada:
para vivir sin alas y oscuramente un día.
Pirámide de sal temible y limitada,
sin fuego ni frescura. No. Vuelve, vida mía.
Mas, algo me ha empujado desesperadamente.
Caigo en la madrugada del tiempo, del pasado.
Me arrojan de la noche. Y ante la luz hiriente
vuelvo a llorar desnudo, como siempre he llorado.”
Imagen: http://cabbagepumpkin. blogspot. com/2009/03/el-nino-yuntero. html
¡Les deseo un buen fin de semana!
Carmen Moreno Martín
Alias Hannah
Información de Carmen Moreno, alias Hannah
Durante este año, por ser el centenario de su nacimiento, nos acompañarán los poemas de aquel a quien nos arrebataron con treinta y un años, y nos silenciaron por más de cuarenta después de muerto. Aquel que amó la vida con pasión hasta la muerte, la suya y todas las vidas y las muertes. Aquel que lucho con la palabra, erigiéndola como arma de presente y de futuro. Aquel que hizo del pueblo oro puro, denunciando la injusticia y la vileza sin césar, haciendo de la libertad su fortaleza aún preso y perseguido y del amor un canto de vida hermoso y constante, aquel de ayer, de hoy y de siempre: Miguel Hernández.
Hoy les dejo dos poemas de él: El niño yuntero en versión cantada por Víctor Jara, video subido a YouTube por Barbara1987, que pueden escuchar clicando aquí y que, tal vez, sea una versión poco conocida, y "El niño de la noche" a continuación:
EL NIÑO DE LA NOCHE
De Miguel Hernández
“Riéndose, burlándose con claridad del día,
se hundió en la noche el niño que quise ser dos veces.
No quise más la luz. ¿Para qué? No saldría
más de aquellos silencios y aquellas lobregueces.
Quise ser... ¿Para qué?... Quise llegar gozoso
al centro de la esfera de todo lo que existe.
Quise llevar la risa como lo más hermoso.
He muerto sonriendo serenamente triste.
Niño dos veces niño: tres veces venidero.
Vuelve a rodar por ese mundo opaco del vientre.
Atrás, amor. Atrás, niño, porque no quiero
salir donde la luz su gran tristeza encuentre.
Regreso al aire plástico que alentó mi inconsciencia.
Vuelvo a rodar, consciente del sueño que me cubre.
En una sensitiva sombra de transparencia,
en un íntimo espacio rodar de octubre a octubre.
Vientre: carne central de todo lo existente.
Bóveda eternamente si azul, si roja, oscura.
Noche final en cuya profundidad se siente
la voz de las raíces y el soplo de la altura.
Bajo tu piel avanzo, y es sangre la distancia.
Mi cuerpo en una densa constelación gravita.
El universo agolpa su errante resonancia
allí, donde la historia del hombre ha sido escrita.
Mirar, y ver en torno la soledad, el monte,
el mar, por la ventana de un corazón entero
que ayer se acongojaba de no ser horizonte
abierto a un mundo menos mudable y pasajero.
Acumular la piedra y el niño para nada:
para vivir sin alas y oscuramente un día.
Pirámide de sal temible y limitada,
sin fuego ni frescura. No. Vuelve, vida mía.
Mas, algo me ha empujado desesperadamente.
Caigo en la madrugada del tiempo, del pasado.
Me arrojan de la noche. Y ante la luz hiriente
vuelvo a llorar desnudo, como siempre he llorado.”
Imagen: http://cabbagepumpkin. blogspot. com/2009/03/el-nino-yuntero. html
¡Les deseo un buen fin de semana!
Carmen Moreno Martín
Alias Hannah