A tu pregunta, desconocido: se es un "viejete" cuando recuerdas más que proyectas, cuando el olor a nardos y jazmines del Paseo te viene a la memoria y al mismo tiempo, vuelves a notar el roce, fortuito y emocionante de la mano de aquella muchacha. Entonces, piensas: "Trini..." y se te saltan las lágrimas. Viejete no se es por los años (cuarenta y bastantes, para tu curiosidad), sino por ese tiempo feliz, la juventud, que pasa y nunca vuelve. Ya hace casi 20 años que no piso El Castillo, pero ahí está, él y mi familia, siempre en lo más calentito de mis recuerdos. Paco (Tarragona).