Dejémos de lado y para siempre el pasado, los rencores y las rencillas. No olvidemos la historia, porque el pueblo que olvida , vuelve a caer en los mismos errores. La historia la escriben los vencedores, sin mas. Los vencidos solo son eso, vencidos. Vencidos y olvidados la inmensa mayoría de las veces. Dejad a los muertos descansar, con sus verdades y sus mentiras, con sus convicciones, con sus errores, con sus aciertos. Que cada quién juzgue según sun entendimiento, sin odio, porque ya lo dijo el sabio, nada es verdad ni es mentira...El espíritu de la contradicción forma parte de nuestra forna de ser, simpre ha sido así y siempre será así. Mi padre, republicano en la guerra, antifranquista y medio ateo, era el mayor de los devotos de "su" morenita. ??. Quedémonos pues con eso y escribamos cada uno nuestra propia historia, en libertad, sin ira y ejerciendo cada uno también, el mayor de nuestros bienes, nuestra libertad.