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THARSIS: ¡Ay! a finales de Mayo, Yo me tuve que marchar, De...

¡Ay! a finales de Mayo,
Yo me tuve que marchar,
De esa Huelva querida,
Dejé mi corazón atrás,
Se cantaba el Emigrante,
Era copla popular,
Y cuando salí de mi Huelva,
Volví la cara llorando,
Y dije tierra mía, que lejos
Te vas quedando tanto como
Te quería.
Huelva no se quedaba lejos,
Ella estaba en su sitio,
Y ahí sigue.
Con su sal marinera,
Y el azul de su mar,
Desde el Coto a Ayamonte,
Y tambien con su cantar,
Como las flores de Mayo,
Tu la hiciste llorar,
Esa estación de Francia,
¡cuanta frialdad!
Cuantas veces, se mira
Y se quiere volver atrás,
Despúes la Barceloneta,
¿por aquí se puede llegar?
Eso amigo es Mediterraneo,
Es aprendiz de mar,
El nuestro el Atlántico,
Que majetuosidad,
ese si es un charco,
Que hasta America va,
Pero su encanto lo tiene en Huelva,
De la que enamorado está,
Allí se besa con el Guadiana,
Y se ponen a jugar,
Con barcas portuguesas,
Que tambien salen a navegar,
Veleros de Punta Umbría,
Que estamos en Mayo ya,
El mes que emigré,
Y quiero retornar,
A esas minas de Tharsis,
Y una nana escuchar,
Ver la vieja cuna,
Si no la quemaron ya,
O un ramo de lentisco,
De Alosno, tierra de buen cantar.
Que sasno con gusto, no pica,
Así dice el refrán.

A tí José.

El Poeta.