Ja, ja, ja, si hermosísima Milagros, empezaré por ti, por que me parto de risa, por que me llega en la brisa, tu perfume y tu encanto y por eso yo no aguanto, los dolores de barriga, de haberme reido tanto, al cantar tu cancioncilla, no son piropos, son nardos lo que yo a ti te daría. Jeje.
María, a tos y a toas nos pasa lo mismo, pero si no es a una hora será en otro ratito, pero algo se nos queda, aunque sea un abreito; Bueno, aprovecha bien y no solo pongas la
comida, alimentate que con tanto
... (ver texto completo)