Ofertas de luz y gas

ALOSNO: Querida Milagros, es que lo de Marcelina es muy largo...

Querida Milagros, es que lo de Marcelina es muy largo de contar, y se quejan de que después son muy largos mis mensajes, tengo sin hacer alarde de nada mucho escrito pero se que de ello nunca comeré, me invitaba un amigo al que tu conoces a que participara por el foro de Rada, pero nada más aparezco, pués mi
"éxito" es tan grande que acuden personas que me dijeron ya no escribian por allí, y la verdad una minoría no me es grata, mi dilatada vida profesional, me ha llevado a muchos sitios, no soy nada tétrico, pero hay epitafios verdaderamente curiosos, tu no es como dices que te inspirates en mi, tienes la suficiente creatividad e inteligencia para valerte por ti misma, yo he llegado a comentar en privado y no me duele prendas decirlo, que tras el personaje de los Topos, a los que ádmiro estás la Señora Milagros, cualquiera que lea revistas de Colegios Profesionales, médicos, industriales, abogados, o revistas de romerias, sabe mi seudonimo que nos es el de Poeta y mi nombre tampoco es ningun secreto, pero es una forma de hacer y en otras pues tengo que firmar con nombre apellidos y documento nacional de idetindad y colegiado.
Pero lo mio Milagros es la copla, y ya se empiezan a apetecer los baños frios,
Así que vete preparando .
Si esto no fuese tan complicado te diria; EPITAFIO PARA UN SEñORITO, (Cuando unas muchachas, cansadas de sonreir falsamente, avivan la sangre de los turistas con el revuelo de sus faldas en el tablao. De fondo, los gallos demoníacos de Viola-esos gallos que el pintor expresara en noches de locura y vino tinto-y se oye el grito del cante con calor de fragua. A las once se pisa la uva en un Lagar del Aljarafe, (no del Aljaraque) ¿recuerdas? y en el cerrado del camino hacia la mar gaditana se arreglan los pitones de seis toros para que el matador del cartel siga mandando. Se levanta la sesión en la Junta de la Hermandad y corre el mosto. Por la calle de Juderias las pisadas resuenan como aldabonazos; cuendo el callejon se ciñe en un quiebro, se besan los novios y el beso le sabe a barro cocido. A esta hora marchaba Rafael el Gallo hacia latertulia de Los Corales, hablando en voz alta con sus fantasmas.
Un coche de caballos da la vuelta al ruedo en la Plaza de Doña Elvira y la vieja saludadora de Triana repite el conjuro para que a la vecina, que bebió donde habia bebido la salamanquesa, no se le caiga el pelo : Los apótoles, las once mil vírgenes, los diez mandamientos, los nueve meses, los ocho gozos, las siete plagas, los seis candeleros, las cinco llagas, los cuatro evangelistas, las tres Marias, las dos tablas de Moisés, la una que parió en Belén y quedó pura.)
El Epitafio para un señorito, una deuda hace que Pepín Jiménez, un señorito andalúz que lo ha tenido todo y que a sus cicuenta años se enfrenta a la ruina, busque la ayuda de quienes fueron sus compañeros de juergas, mujeres, y alcohol durante su juventud, en la narrativa se entreteje los recuerdos de Pepin y sus compañeros de esos años para dar forma a una magnifica exposición de la figura del señorito.
Esto es parte del preambulo, hasta desarrollar una leyenda o historia, más o menos cierta.
Creo que por hoy esta bien, pués empece a escribir ayer.
Besos: El Poeta.