PEDRO MARTINEZ: Seguimos en la Ruta del Geoparque Granaino digno de...

Seguimos en la Ruta del Geoparque Granaino digno de visitar y que pocos conocen cerca de nuestro pueblo.

Perfil de Huéscar, una villa cargada de historia.
La Gran Senda tiene en Huéscar el punto de salida y llegada. Es la ciudad más importante del Altiplano de Granada, situada a orillas del río Barbatas y al amparo de la sierra de la Encantada. Paseando por su elegante casco histórico vamos a contemplar su rico patrimonio cultural: casas señoriales con blasones, la Colegiata de Santa María, el Teatro Oscense, La Torre del Homenaje, iglesias y conventos. Y para conocer la ciudad de la forma más entretenida solo hay que entrar el Museo Interactivo de la Ciudad de Huéscar, en el Convento de San Francisco. Es, además, un bello paraje natural en el que se pueden apreciar unas gigantescas secuoyas, plantadas hace más de cien años. El río Guardal cuenta con varios monumentos a su paso por Huéscar: el Puente de la Ánimas (o acueducto de Raigada) del siglo XVI, que fue declarado monumento nacional de carácter histórico-artístico en 1982, o el Puente Duda, cuyos pilares descansan sobre roca viva. Además, en la finca de las Fuentes de Guardal se encuentra la cabecera del Canal de Carlos III.

Piscifactoría Las Fuentes
Fuentes del río Guardal.
Salimos del paisaje más desértico en busca del agua, que también hay y mucho en el Altiplano. Las Fuentes del río Guardal constituyen la cabecera de este hermoso río, paseando por su margen veremos sus meandros, pozas, cascadas y gran variedad de flora y fauna. Es un enclave fascinante. Muy cerca se encuentra la Piscifactoría Las Fuentes, donde vamos a poder ver de cerca el proceso de la acuicultura de la trucha arco iris y la trucha común.

Piscifactoría Las Fuentes y sus planes de ocio en familia.
Además de comprar truchas frescas, en la piscifactoría se puede practicar la pesca al aire libre en los lagos trucheros. Constituye un gran entretenimiento individual y familiar, al tiempo que disfrutarás de un entorno natural especialmente hermoso.

Dormir en una cueva… abrazados a la Tierra
Una de las experiencias más relajantes que vas a vivir en el Altiplano de Granada es la de dormir en una auténtica cueva. Quien lo ha probado asegura que hay un antes y un después. El contacto tan estrecho con la tierra ejerce unos efectos muy placenteros y nos prometen que vamos a dormir… ¡como nunca!

Hasta los años 80, era muy común vivir en cuevas, desde el siglo XVI, aprovechando las características del terreno se excavaban las viviendas que mantienen la temperatura uniforme en invierno y verano. Muchas de estas viviendas se han convertido en alojamientos rurales, en cuevas-hotel.

Hotel-cueva La Atalaya, con seis alojamientos con todas las comodidades.
En Huéscar, podemos vivir la experiencia en las Cuevas La Atalaya. Es un conjunto de seis casas cueva (Cueva la Escalera, Cueva la Barbacoa, Cueva el Ventanal, Cueva la Rueda, Cueva la Artesa y Cueva la Cornisa), cada una tiene varias habitaciones, además de la sala y cocina, y hasta piscina comunitaria, barbacoa y chimenea, para ir en cualquier época del año. Son, además, un magnífico punto de partida para la realización de multiaventuras y turismo activo, los amantes de la espeología tienen cerca numerosas grutas naturales para seguir explorando la experiencia de vivir en las entrañas de la Tierra.