Ofertas de luz y gas

PEDRO MARTINEZ: El Rey Midas Leyendas...

El Rey Midas Leyendas

Un día el rey Midas se encontró con un hombre viejo en gran estado de embriaguez llamado Sileno, debido a su estado este apenas podía mantenerse en pie y estaba completamente perdido y desorientado.

Pese a ser un borrachín, Sileno conocía el secreto de la sabiduría, por lo que el Rey Midas decide llevarlo a su palacio para sacarle dicho secreto; durante su estadía lo trató muy bien hasta que consiguió lo que quería, para luego devolverlo a Dionisio, el cual es el Dios del Vino, ya que Sileno era parte de su báquico.

En agradecimiento por la buena voluntad que tuvo con Sileno y por la devolución, Dionisio le dice al Rey Midas que le concederá el deseo que él quiera, a lo que este responde de forma inmediata que desea tener el don de convertir en oro todo lo que toca.

Dionisio otorga la dádiva y el Rey Midas se dirige a su palacio, comprobando durante el camino que efectivamente todo aquello que sus manos tocaban se convertía en reluciente piezas de oro sólido.

Emocionado llega a casa, pues sentía que su deseo había sido el mejor de todos los que podía pedir.

Sin embargo una vez se sienta a comer y a beber, el Rey se percata que el pan se ha convertido en una pieza dura de oro que no podría morder y que el vino se convertía en polvo de oro, por lo que no podría zacear su sed.

Pero el Rey pensó que podría encontrar la solución a ese inconveniente.

Por otro lado emocionado decide contarle el don que posee a su hija, por lo que cuando la ve entrar por la puerta, entusiasmado se dirige a ella, al abrazarla inminentemente esta se convierte en una gran estatua de oro.

El rey ruega al Dios que le quite el don, pues descubre que no sirve tener el oro sino pueden abrazar a su hija y comer o beber.