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PEDRO MARTINEZ: LEYENDAS GRANAINAS. La Leyenda de la Montaña del Oro....

LEYENDAS GRANAINAS. La Leyenda de la Montaña del Oro.
Cuenta la leyenda que la Alhambra se asienta sobre una montaña de oro, y pudiera ser verdad.
La vieja tradición de buscar oro en las faldas del Río Darro, a los pies del monumento nazari, y que aún la recuerdan muchos viejos granainos, tiene una base científica real;
La Colina de la Sabika, que para los geologos es conocida como "el conglomerado Alhambra", que no es sino, el último puerto donde llegan los sedimentos originados en Sierra Nevada hace millones de años, y el oro era, el principal de ellos, nació en las cuarcitas paleozoicas del llamado "manto del Mulhacen.
Lugares como la Lancha del Genil, a sólo 3 kilómetros de la capital granaina, fueron en su día, verdaderos yacimientos auriferos, los romanos los explotaban con métodos expeditivos.
Drenaban las montañas con tales cantidades de agua, que estas, al final, estallaban literalmente, y así afloraba el oro.
" hay que tener en cuenta, que el proceso de formación de este metal precioso es muy peculiar.
El oro se origina en pequeñas partículas en Sierra Nevada, esas partículas son arrastradas montaña abajo y, como ocurre con el mercurio, se unen cuando entran en contacto entre sí, formando pepitas, que luego son arrastradas por el cauce de los ríos.
Los musulmanes granainos, parecieron no mostrar mucho interés por el preciado metal, y construyeron la Alhambra sobre una zona de sedimentacion.
"la Alhambra está encima, técnicamente, de una mina de oro", pero no sería cuestión de echar abajo el viejo monumento por unas cuantas pepitas de oro ¿, ¿no creéis?.
Durante muchos años, una de las imágenes mas frecuentes, era ver gente agachada en las riberas del Río Darro, bajo la Alhambra, buscando las anciadas pepitas de oro, parecían, locos soñadores, los hubo hasta no hace mucho tiempo.
Aunque no eran del todo, tan locos, o tan fantasiosos, incluso hoy, hay estudiantes de geología, que en sus prácticas, encuentran restos del metal dorado sobre dicho terreno, recordar que hasta el nombre del rio, viene de la palabra "Dauro" que quiere decir "que da oro" llamado así por los romanos.
" Granada, precisamente, fue importante sobre todo, en la época de los romanos y en el siglo XIX, cuando compañías francesas decidieron esplotar los yacimientos de la ciudad ".
La realidad hoy es diferente,
en los años sesenta una compañía canadiense acudió para ver los posibles beneficios, la conclusión fue clara, hay oro, si, en la lengua de tierra encerrada entre los ríos Darro y Genil, pero la presencia del metal es tan baja, que no hace rentable el coste de la inversión, el porcentaje es mínimo, así que, sigue valiendo más el peso de la leyenda.