PEDRO MARTINEZ: Llorando me la encontré...

Llorando me la encontré
en una calle en Granada,
llorando me voy de pena
que ya no te vuelvo a ver
Granada de mis amores,
Granada de mi querer.

Cuánta verdad en aquel llanto
del llanto de aquella mujer
que pronto se marcharía,
para nunca más volver.

Es dura la despedida
de marcharse y dejarte
la joya más preciada,
que Dios pudiera hacer.

Es tu Sierra Nevada
donde nace el Genil,
que baja alegre cantando
con sus aguas cristalinas,
hasta el río Guadalquivir.

Que hermosa está la Alhambra
de la noche de los tiempos,
la historia se repite
una y otra vez más.
Es la historia de aquel rey moro
que tuvo que dejar Grana
está llorando con amargura,
y suspirando sin cesar.

Con el paso de los años
por las noches de escucha llorar,
" Ay de mí Alhambra ",
" Ay de mí bella Granada "
no hay otra en el mundo,
que sea más bella que tú
! Granada de mis amores!
! cuánto te quiero yo!

Manuel Lindez Rodríguez.