PEDRO MARTINEZ: El tren de la vida. A veces dulce, otras muchas muy...

El tren de la vida. A veces dulce, otras muchas muy desolador

Llévame al baile, hijo, que aún no estoy tan vieja;
quiero lucirme contigo bailando del brazo sujeta…

Llévame al teatro, hijo, que aún no estoy tan ciega;
escucharé los preludios contigo a mi lado bien cerca…

Llévame a la calle, hijo, que aún tengo buenas piernas;
a caminar sin rumbo fijo contigo no me sentiré vieja…

Invítame a tu casa, hijo, el Domingo en la mañana;
a compartir tu buena mesa y sentirme...