Pepemg, espero que tu cumpleaños incluya cantos, pastel, mucha gente y felicidad.
¡FELIZ CUMPLEAÑOS!... Besillos...
¡FELIZ CUMPLEAÑOS!... Besillos...
Sensi, así mismo ha sucedido: cumpleaños feliz, pastel y café con leche y asistencia d mis hijos, mis nietos y la benjamina de la familia, María, que mañana cumple su primera semana de vida.
Besillos.
Besillos.
Amiga Sensi, buenas tardes. Pues no, no estuve de verbena el día 11 pese a ser fiesta en toda Cataluña. Tampoco de manifestación. El día 10 por la noche me dijo Montse, mi hija, si quería ir con ellos a la montaña. Dije que sí. Así que salimos a las seis y media de la mañana dirección Francia. La idea era llegar a Molló, en los Pirineos. Nos paramos a desayunar en Camprodon, 1182 m. sobre el nivel del mar, situado en el valle de Camprodon, por el que discurren los rios Ter y Ritort. El relieve es llano en el valle y accidentado en las vertientes de las montañas que conforman el valle. Nos adentramos luego en territorio francés por la aduana del
Coll d’Ares (1527 m de altitud) hoy sin guardias ni gendarmes. Nos dirigimos a un lugar del bosque, conocido de otros años, donde abunda el rovellón o mízcalo. Ni una seta. Ni buenas ni malas. Allá abajo, en el valle se veía Prats-de-Mollo-la-Preste (Prats de Molló i la Presta en catalán), cantón francés de la Región Languedoc-Rosellón, en la comarca del Vallespir, Departamento Pirineos Orientales. Para hacerte una idea de cómo se ve el pueblo desde la cota más alta de la montaña, piensa que la altitud máxima del témino es de 2.693 metros sobre el nivel del mar y la mínima de 575 m., el pueblo está a una altitud de 735 m. Impresionante la vista de Prats de Molló i la Presta desde las alturas. Saqué algunas fotografías desde el lugar en que nos encontrábamos y fue entonces cuando Montse nos pidió bajar hasta allí en plan turismo. Y eso hicimos. La extensión de este pueblo es de 145 km2 (un poco más extenso que Pedro Martínez).
Prats de Molló es un pueblo particularmente fascinante: Aire estimulante, un silencio inquietante, espacios infinitos, luminosidad casi irreal y la belleza salvaje de un pueblo con carácter. Para disfrutar de la naturaleza, una mezcla rejuvenecedora de actividades al aire libre, sin olvidar un patrimonio cultural sorprendente, por ejemplo la iglesia parroquial Santa Justa y Rufina, una marvilla. El pueblo está separado por el rió Tesch. Cada una de las partes sube a los flancos del valle. En el siglo XIII, en la parte norte se extendía la ciudad propiamente dicha con su población trabajadora, mientras que al frente se encontraba el castillo donde residían las pocas familias dirigentes. Este castillo servía de residencia a los condes de Besalú. En la segunda mitad del siglo XVII (1666), conducida por el pañero y salinero Josep de Trinxeria, se produce la «revuelta de los “Angelets de la Terra”, que toma muy rápidamente un cariz de levantamiento anti-francés y se prolongará hasta 1673. Dicha revuelta será una de las causas de la construcción del Fort Lagarde por el mariscal de Luis XIV Sébastian Vauban. Dominando la ciudad fortificada, el Fort Lagarde fue construido para proteger la nueva frontera y vigilar la entrada del Alto Vallespir y, a su vez, evitar una nueva revuelta como la de los “Angelets de la Terra” y mantener a raya a los habitantes descontentos debido a la anexión de los condados de la Cataluña norte a Francia. Al Fuerte se accede hoy o bien por el Camí dels Capellans (al aire libre) o por un pasadizo abovedado poco amplio por el que se tarda 20 minutos aproximadamente en llegar hasta arriba. Fort Lagarde fue restaurado y denominado en su momento y de forma oficial como Monumento Histórico de Francia. Cuando nos disponíamos a subir una tromba de agua nos lo impidió, comenzó a llover a mares. Continuamos un rato dentro del coche esperando que escampara, pero como no, decidimos volver. Eran las 4:30 de la tarde. Menos mal que nos dio tiempo antes de recorrer el casco urbano histórico, sus murallas, sus torres, ver sus monumentos. Prats de Mulló i la Presta tiene algunas calles bien trazadas, llanas, edificios modernos. Pero lo más vistoso es la ciudad medieval (data del siglo IX) calles pequeñas, empinadas, escalonadas algunas y todas ellas empedradas. Una muralla separa la Iglesia (parte trasera) del Cementerio, o sea, éste, como en la edad media, se extiende por el entorno de la Iglesia. Volveremos a Prats de Mulló el día 24 del presente mes, día de Ntra Sra. De la Merced, fiesta también en Cataluña. La visita a Fort Lagarde (Fuerte la Guardia) será obligada, pues es lo único que nos queda por ver de este pueblecito francés tan guapo. Decir, por último, que este fue el paso en 1939 de una quinta parte de los 550.000 republicanos de “La Retirada”.
En fin, Sensi, te he hecho partícipe de nuestro paseo por suelo francés. Venga, Besillos.
Coll d’Ares (1527 m de altitud) hoy sin guardias ni gendarmes. Nos dirigimos a un lugar del bosque, conocido de otros años, donde abunda el rovellón o mízcalo. Ni una seta. Ni buenas ni malas. Allá abajo, en el valle se veía Prats-de-Mollo-la-Preste (Prats de Molló i la Presta en catalán), cantón francés de la Región Languedoc-Rosellón, en la comarca del Vallespir, Departamento Pirineos Orientales. Para hacerte una idea de cómo se ve el pueblo desde la cota más alta de la montaña, piensa que la altitud máxima del témino es de 2.693 metros sobre el nivel del mar y la mínima de 575 m., el pueblo está a una altitud de 735 m. Impresionante la vista de Prats de Molló i la Presta desde las alturas. Saqué algunas fotografías desde el lugar en que nos encontrábamos y fue entonces cuando Montse nos pidió bajar hasta allí en plan turismo. Y eso hicimos. La extensión de este pueblo es de 145 km2 (un poco más extenso que Pedro Martínez).
Prats de Molló es un pueblo particularmente fascinante: Aire estimulante, un silencio inquietante, espacios infinitos, luminosidad casi irreal y la belleza salvaje de un pueblo con carácter. Para disfrutar de la naturaleza, una mezcla rejuvenecedora de actividades al aire libre, sin olvidar un patrimonio cultural sorprendente, por ejemplo la iglesia parroquial Santa Justa y Rufina, una marvilla. El pueblo está separado por el rió Tesch. Cada una de las partes sube a los flancos del valle. En el siglo XIII, en la parte norte se extendía la ciudad propiamente dicha con su población trabajadora, mientras que al frente se encontraba el castillo donde residían las pocas familias dirigentes. Este castillo servía de residencia a los condes de Besalú. En la segunda mitad del siglo XVII (1666), conducida por el pañero y salinero Josep de Trinxeria, se produce la «revuelta de los “Angelets de la Terra”, que toma muy rápidamente un cariz de levantamiento anti-francés y se prolongará hasta 1673. Dicha revuelta será una de las causas de la construcción del Fort Lagarde por el mariscal de Luis XIV Sébastian Vauban. Dominando la ciudad fortificada, el Fort Lagarde fue construido para proteger la nueva frontera y vigilar la entrada del Alto Vallespir y, a su vez, evitar una nueva revuelta como la de los “Angelets de la Terra” y mantener a raya a los habitantes descontentos debido a la anexión de los condados de la Cataluña norte a Francia. Al Fuerte se accede hoy o bien por el Camí dels Capellans (al aire libre) o por un pasadizo abovedado poco amplio por el que se tarda 20 minutos aproximadamente en llegar hasta arriba. Fort Lagarde fue restaurado y denominado en su momento y de forma oficial como Monumento Histórico de Francia. Cuando nos disponíamos a subir una tromba de agua nos lo impidió, comenzó a llover a mares. Continuamos un rato dentro del coche esperando que escampara, pero como no, decidimos volver. Eran las 4:30 de la tarde. Menos mal que nos dio tiempo antes de recorrer el casco urbano histórico, sus murallas, sus torres, ver sus monumentos. Prats de Mulló i la Presta tiene algunas calles bien trazadas, llanas, edificios modernos. Pero lo más vistoso es la ciudad medieval (data del siglo IX) calles pequeñas, empinadas, escalonadas algunas y todas ellas empedradas. Una muralla separa la Iglesia (parte trasera) del Cementerio, o sea, éste, como en la edad media, se extiende por el entorno de la Iglesia. Volveremos a Prats de Mulló el día 24 del presente mes, día de Ntra Sra. De la Merced, fiesta también en Cataluña. La visita a Fort Lagarde (Fuerte la Guardia) será obligada, pues es lo único que nos queda por ver de este pueblecito francés tan guapo. Decir, por último, que este fue el paso en 1939 de una quinta parte de los 550.000 republicanos de “La Retirada”.
En fin, Sensi, te he hecho partícipe de nuestro paseo por suelo francés. Venga, Besillos.
Pepemg, me lo has explicado tan bien que he estado de paseo contigo, me encanta,
ahora mirare en internt y vere el pueblo... bueno que pases una buena tarde noche
besillos...
ahora mirare en internt y vere el pueblo... bueno que pases una buena tarde noche
besillos...
Buenas tardes Sensi. En verdad que es bonito ese pueblo. No es muy grande (tiene mil y pico habitantes) pero la parte antigua es digna de ver. El día 24 queremos volver. Esté pueblo está, creo, como a unos 40 km de donde vive Antonia, algo así como de Pedro Martínez a Iznalloz o al pueblo de Jérez en el Marquesado, aunque la carretera es más tortuosa que esas nuestras. Siempre es bonito conocer lugares, sea por explicación, viéndolos en fotos o personalmente. también yo entro en Internet para ver fotografías de distintos lugares.
Una buena tarde noche para tí. Besillos.
Una buena tarde noche para tí. Besillos.
Hola Pepemg, los que no podemos viajar, nos conformamos con las vivencias de otros
y ahora con esta maravilla de internet que se viaja a cualquier sitio del mundo
se pasa muy bien, he visto algo de Prats de Mollé, es muy bonito, pero no he encontrado muchas fotos... quizas en google earth pueda verlo, no he probado...
besillos...
y ahora con esta maravilla de internet que se viaja a cualquier sitio del mundo
se pasa muy bien, he visto algo de Prats de Mollé, es muy bonito, pero no he encontrado muchas fotos... quizas en google earth pueda verlo, no he probado...
besillos...
