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PEDRO MARTINEZ: Buenas noches Sensi. Se ve que no hemos reunido suficientemente...

Hola pepemg, farta me hace que reunais todas las fuerzas positivas y me alcanzen,
poeque ya estoy arta de hospital, tú veo que te vas fortaleciendo, eso es bueno,
te mando un besillo...

Buenas noches Sensi. Se ve que no hemos reunido suficientemente las fuerzas positivas pues éstas todavía no te han alcanzado... ¡Cuánto lo siento! Tu hospitalización se alarga ya un poquito. Ahí, en Granada, hay un santo al que muchísimas personas de todas partes le tienen gran devoción (haciendo yo la mili coincidí con él por las calles de Granada) oye, dicen que como era tan bonachón sólo sabía hacer el bien y lo continúa haciendo después de sus años muerto. Si quieres, probamos pidiéndole por tu mejoría total. Ah, ese buen hombre, frayle capuchino, es Fray Leopoldo de Alpardier. María, mi mujer, en su primer infarto estuvo en la UVI durante un mes, entubada, asistida de respiración artificial, monitores, sueros, transfusiones, etc. Me dijo el cardiólogo que pocas personas salian con vida de esa situación. Ella no podía hablar, pero por su forma de mirarme veía yo que algo me quería decir. Le dije que no se esforzara, yo le iría preguntando y ella me diría sí o no moviendo la cabeza. Con las preguntas fuí descartando cosas hasta acertar con lo que me pedía: Una estampa de Fray Leopoldo, ya ves. Se la llevé y después de enseñársela se la pegué en la cabecera de la cama. A los pocos días la trasladaron del Taulí al Clínico y unos días después la desentubaron y le dieron el alta. Después de este episodio vivió catorce años. Aquel mismo año quiso ir a Granada a visitar la tumba de Fray Leopoldo. Y lo hizo.

Bueno, yo estoy mejor, todavía de médicos, pero bastante mejor; Tengo visitas programadas en el Taulí para el 17, 20, 24 y 26 de Octubre. Después de estas pruebas ya me dirán algo definitivo, creo.

Tú, no mires hacia atrás para contar el tiempo que llevas hospitalizada, tómate cada día como si fuese el primero y piensa que vas a tener pronto una gran mejoría y que antes de que hagan la propaganda del turrón del almendro vas a estar en casa. Ese es mi deseo más ardiente.

Venga, un besillo.