Buenas noches amigos. Nunca, había recibido tantas felicitaciones.
Sois unos soles. Quiero daros las gracias y si me he dejado a alguien sin contestar, pido perdón. Pués ayer no pude hacerlo y hoy, tenia un lio que no sabía por donde empezar.
Os voy a contar un poco como fue mi cumpleaños porque fue un día completito.
A las 9,30 salía con David, que tenía partido en Vilassar de Mar.
Un día esplendido de sol; como hasta las 12 no era el partido, yo me llevé mi libro, desayuné en aquella terraza preciosa que tiene ese campo y estuve con mi lectura hasta que empezó el partido. Mi hijo estaba en el banquillo pero pensé
buenoooo como no juega ahora voy a darle una vuelta al campo, y así ando un poco.
Si si, pegué un porrazooooo, que solo faltó que viniese el árbitro que vergüenza
por diossss. Una vez que me atendieron y yo, me tranquilizé ya me fuí para las gradas y en la segunda parte, salió David y metió un golazo (me lo dedicó) y pensé bueno una de cal y otra de arena como se suele decir.
Fuimos a un Viena y nos comimos un bocadillo y una ensalada no tenía tiempo para más porque a las cuatro, venía mi hijo mayor y su mujer a buscarme para darme una sorpresa;
menos mal que no me llevaron a montar en globo o tirarme de un paracaidas. ¿Os imaginais?
La sorpresa fué muy grata.
Me llevaron al Teatro Coliseun de Barcelona a ver una actuación de Los Morancos.
Me reí un montón. Después fuimos a tomar un café en una de las cafeterías más antiguas de barcelona (la cafetería Zurict) yo voy muy poco a Barcelona pero cuando voy me gusta ir a tomarme un café allí.
Y ahí es cuando empieza a dar señales de vida, mi gran porrazo.
El golpe, me lo llevé todo en la rodilla izquierda pero cuando quise levantarme de esta cafetería, no podía apoyar en el suelo, mi pie derecho.
Cuando llegué a casa, no podía ni moverme. Mi hijo quería que fuesemos a urgencias pero yo no quise. Mi hermana me dió con una pomada, me vendó el tobillo, me tomé un nolotil y he amanecido nueva.
Mi rodilla toda amoratada, pero no me molesta.
Bueno como habreis visto, el día dió para todo; bueno, malo, regalos y el mejor, vuestras felicitaciones.
Un abrazo para todos.
Sois unos soles. Quiero daros las gracias y si me he dejado a alguien sin contestar, pido perdón. Pués ayer no pude hacerlo y hoy, tenia un lio que no sabía por donde empezar.
Os voy a contar un poco como fue mi cumpleaños porque fue un día completito.
A las 9,30 salía con David, que tenía partido en Vilassar de Mar.
Un día esplendido de sol; como hasta las 12 no era el partido, yo me llevé mi libro, desayuné en aquella terraza preciosa que tiene ese campo y estuve con mi lectura hasta que empezó el partido. Mi hijo estaba en el banquillo pero pensé
buenoooo como no juega ahora voy a darle una vuelta al campo, y así ando un poco.
Si si, pegué un porrazooooo, que solo faltó que viniese el árbitro que vergüenza
por diossss. Una vez que me atendieron y yo, me tranquilizé ya me fuí para las gradas y en la segunda parte, salió David y metió un golazo (me lo dedicó) y pensé bueno una de cal y otra de arena como se suele decir.
Fuimos a un Viena y nos comimos un bocadillo y una ensalada no tenía tiempo para más porque a las cuatro, venía mi hijo mayor y su mujer a buscarme para darme una sorpresa;
menos mal que no me llevaron a montar en globo o tirarme de un paracaidas. ¿Os imaginais?
La sorpresa fué muy grata.
Me llevaron al Teatro Coliseun de Barcelona a ver una actuación de Los Morancos.
Me reí un montón. Después fuimos a tomar un café en una de las cafeterías más antiguas de barcelona (la cafetería Zurict) yo voy muy poco a Barcelona pero cuando voy me gusta ir a tomarme un café allí.
Y ahí es cuando empieza a dar señales de vida, mi gran porrazo.
El golpe, me lo llevé todo en la rodilla izquierda pero cuando quise levantarme de esta cafetería, no podía apoyar en el suelo, mi pie derecho.
Cuando llegué a casa, no podía ni moverme. Mi hijo quería que fuesemos a urgencias pero yo no quise. Mi hermana me dió con una pomada, me vendó el tobillo, me tomé un nolotil y he amanecido nueva.
Mi rodilla toda amoratada, pero no me molesta.
Bueno como habreis visto, el día dió para todo; bueno, malo, regalos y el mejor, vuestras felicitaciones.
Un abrazo para todos.
