Hay temporales y temporales... gotas frías, escarchas matinales, nieves copiosas... Pero la peor de las inclemencias, la de los hielos sobre la
nieve que da lugar a largos y agudos carámbanos (chupones en nuestro
pueblo). Cuando alguno de estos chuzos de punta cae sobre la cabeza de alguien, no sólo le congela las palabras sino también el pensamiento. A pesar de ello, la máquina quita carámbanos (chupones) aún no se ha inventado, que yo sepa. Si las
fraguas del Pintaíllo y los Caballero hubiesen
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